Acrocordones: causas, prevención y opciones estéticas para su eliminación
 
					Los acrocordones son pequeñas lesiones cutáneas benignas que suelen pasar desapercibidas al principio, pero que con el tiempo pueden multiplicarse y convertirse en un problema estético. Se presentan como pequeños bultos blandos del color de la piel o ligeramente más oscuros, y su tamaño varía desde unos milímetros hasta medio centímetro. Aunque son inofensivos, eliminarlos correctamente mejora la apariencia de la piel y previene irritaciones o inflamaciones.
Por qué aparecen los acrocordones
El origen exacto de los acrocordones no está completamente definido, pero sí se sabe que hay varios factores desencadenantes. La fricción constante en zonas como el cuello, las axilas, el escote o las ingles es una de las principales causas. Además, el sobrepeso, los cambios hormonales, el embarazo y los niveles altos de insulina pueden favorecer su desarrollo.
La genética también juega un papel importante: si uno de los padres presenta acrocordones, es más probable que los hijos los desarrollen en la edad adulta. Por otro lado, el estrés oxidativo y el desequilibrio en el colágeno cutáneo pueden contribuir a su aparición, especialmente en personas mayores.
Aunque no suponen un riesgo para la salud, es fundamental no intentar quitarlos en casa, ya que cortarlos o aplicar remedios caseros puede generar infecciones, cicatrices o reacciones inflamatorias. Un especialista debe examinar la lesión para confirmar su naturaleza benigna y definir el tratamiento más adecuado.
Métodos eficaces para eliminarlos sin dañar la piel
La medicina dermatológica actual ofrece diversas alternativas para eliminar acrocordones de forma rápida y segura. Entre las más eficaces destacan:
- 
Láser CO₂: vaporiza la lesión con precisión milimétrica, dejando la piel uniforme y sin cicatriz visible. 
- 
Electrocoagulación: destruye el tejido del acrocordón mediante calor controlado. 
- 
Crioterapia: congela la lesión con nitrógeno líquido para que se desprenda al cabo de unos días. 
- 
Radiofrecuencia estética: una técnica moderna que permite tratar zonas delicadas como párpados o cuello con gran precisión. 
Además, tras el procedimiento, se recomienda aplicar fotoprotección y productos regeneradores para mantener la piel en óptimas condiciones y prevenir nuevas formaciones.
La Clínica Idermic en Terrassa, se ha consolidado como un referente en la eliminación de acrocordones y otras lesiones dermatológicas benignas. Su equipo médico combina distintos métodos —desde el láser dermatológico hasta la crioterapia— para ofrecer resultados naturales y seguros, cuidando siempre la salud y la estética de la piel del paciente.


 
			 
			 
			 
			 
			