Enfermedades de transmisión sexual más frecuentes

Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) continúan siendo uno de los principales retos de salud pública a nivel mundial. Su propagación se debe, en gran medida, al desconocimiento y a la ausencia de síntomas visibles en muchas de ellas. Conocer sus características, vías de contagio y tratamientos disponibles es fundamental para prevenir complicaciones y frenar su avance.
Enfermedades de transmisión sexual más frecuentes
Estas son las 10 enfermedades de transmisión sexual más frecuentes en la actualidad:
1. Virus del Papiloma Humano (VPH)
Es la infección de transmisión sexual más frecuente. Existen más de 100 tipos de VPH, algunos de ellos relacionados con la aparición de verrugas genitales y otros con el desarrollo de cáncer de cuello uterino, pene o garganta. La vacunación y el uso del preservativo son las medidas más eficaces de prevención.
2. Clamidia
Provocada por la bacteria Chlamydia trachomatis, afecta principalmente a jóvenes sexualmente activos. A menudo pasa desapercibida, pero puede causar infertilidad si no se trata. Los antibióticos permiten su curación total cuando se diagnostica a tiempo.
3. Gonorrea
Causada por Neisseria gonorrhoeae, esta infección puede afectar tanto a hombres como a mujeres. Se transmite por contacto sexual y puede provocar infecciones en genitales, garganta o recto. Su tratamiento requiere antibióticos específicos y control médico posterior.
4. Sífilis
Se manifiesta en varias fases y, si no se trata, puede afectar al sistema nervioso y cardiovascular. En su fase inicial aparece una úlcera indolora, seguida de erupciones cutáneas. La penicilina sigue siendo el tratamiento de referencia.
5. Herpes genital
El virus del herpes simple tipo 1 o 2 causa brotes de ampollas y úlceras dolorosas. Aunque no tiene cura definitiva, los antivirales ayudan a controlar los episodios y reducir la posibilidad de transmisión a otras personas.
6. Tricomoniasis
Producida por el parásito Trichomonas vaginalis, puede provocar flujo anormal, picor o ardor. Es una de las ITS más comunes y se trata fácilmente con medicación antiparasitaria.
7. VIH / SIDA
El virus de la inmunodeficiencia humana debilita el sistema inmunitario, y sin tratamiento puede derivar en SIDA. La terapia antirretroviral permite a las personas infectadas llevar una vida larga y saludable, con carga viral indetectable y sin riesgo de transmisión.
8. Hepatitis B
Además de transmitirse por sangre, también puede contagiarse por vía sexual. Puede causar desde una infección aguda hasta enfermedades hepáticas graves. La vacunación es una herramienta clave para su prevención.
9. Linfogranuloma venéreo
Producido por cepas específicas de Chlamydia trachomatis, se presenta con úlceras genitales y ganglios inflamados. Su tratamiento consiste en antibióticos durante varias semanas para evitar complicaciones.
10. Molluscum contagiosum
Es una infección viral que genera pequeñas pápulas o lesiones perladas en la piel. Aunque suele ser benigna, requiere tratamiento dermatológico para eliminar las lesiones y evitar su propagación.
La prevención y diagnóstico precoz, la mejor defensa
La prevención sigue siendo la mejor estrategia frente a las ETS. El uso correcto del preservativo, la reducción del número de parejas sexuales, la vacunación frente al VPH y la hepatitis B, y las revisiones médicas periódicas son medidas esenciales. Además, el diagnóstico precoz mediante análisis y cribados permite tratar la mayoría de estas infecciones de forma efectiva, evitando daños mayores y reduciendo su transmisión.
La importancia del control dermatológico especializado
Muchas infecciones de transmisión sexual presentan manifestaciones cutáneas, por lo que el papel del dermatólogo es fundamental para su detección. Centros especializados, como la Clínica Idermic en Terrassa cuentan con profesionales expertos en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades dermatológicas, ofreciendo un enfoque integral para el cuidado de la piel y la salud sexual.