Los árboles ubicados en las ciudades no solo son parte del paisajismo urbano. Los ejemplares que encontramos tanto en pequeños municipios como grandes urbes como Madrid o Barcelona son vitales para el bienestar de sus ciudadanos.
Además de ser excelentes filtros para los contaminantes urbanos y diminutas partículas existentes en el ambiente, aportan otros muchos beneficios.
Por ello, es fundamental que todos aquellos ejemplares ubicados en terreno urbano, tanto público como privado, sean gestionados de manera correcta para su mantenimiento y conservación en el tiempo. Entre los trabajos para alcanzar dicho objetivo se encuentra la poda de árboles en Madrid.
Madrid, ejemplo de ciudad arbórea.
Madrid es la capital de la Unión Europea con más ejemplares y, en la actualidad, ostenta el puesto de segunda ciudad del mundo con más árboles, solo superada por Tokyo. El arbolado madrileño cumple a la perfección con los cinco estándares requeridos por la organización: estructura de gestión de masa arbórea, normativa sobre su cuidado, censo o inventario arbóreo, recursos financieros y educación ambiental.
La necesidad de los árboles urbanos radica en la multitud de beneficios que mejoran la calidad de vida en las ciudades.
La concienciación por parte del Ayuntamiento así como por el resto de la población (a través de las vías de participación) son fundamentales para que la capital de España sea en el futuro una ciudad mucho más saludable y sostenible.
¿Por qué podar los árboles urbanos?
Como hemos mencionado anteriormente el objetivo de cualquier municipio debe ser conservar una arboleda sana y, para ello, es fundamental emplear todos los recursos necesarios. La poda de árboles en Madrid es una labor fundamental para el correcto desarrollo de sus ejemplares.
Para alcanzar el objetivo de la poda de árboles se requiere de diferentes estrategias según la especie, la etapa de vida y el tamaño del ejemplar.
En el caso de la poda de árboles en Madrid su objetivo siempre debe ir enfocado en reducir las condiciones que contribuyen a su debilidad, ya que, no debemos olvidar que se encuentran plantados en un espacio desfavorable para su desarrollo.
Una poda bien ejecutada trae consigo grandes beneficios, tratando y evitando algunos problemas:
- Mejora su apariencia visual.
- Reduce el riesgo de rotura de ramas y tallos, ya que, se eliminan las ramas sobrantes o quebradizas.
- Al vaciar las copas irregulares o desestructuradas se consigue un mejor crecimiento y desarrollo del ejemplar. Una poda de utilidad mantiene a las ramas alejadas de cables manteniendo el espacio más libre.
- Reduce el riesgo de padecer plagas arbóreas.
- Estudios erróneos de viabilidad de plantaciones en el pasado unido al crecimiento de las ciudades, trae como consecuencia hoy en día daños a edificios colindantes o infraestructuras próximas o, incluso, ocultación de señales de tráfico. Por ello, en estos casos la poda de árboles urbanos es fundamental para evitar terribles consecuencias.
Al contrario cuando esta se realiza incorrectamente, la poda puede dañar la salud del ejemplar, su estabilidad además de su estética. En consecuencia, este trabajo debe dejarse siempre en manos de empresas de poda de árboles en Madrid, sólo de esta manera podemos garantizar que los operarios conozcan las necesidades de cada especie y el tipo de poda a ejecutar. Además solo en manos expertas que amen y mimen la naturaleza evitamos prácticas poco recomendables como las podas drásticas o desmoche.
Sin ninguna duda, son muchos los motivos por los que se deben podar los árboles urbanos, principalmente porque gracias a estas labores de cuidado y mantenimiento los ciudadanos salimos favorecidos de muchos de los beneficios de los árboles en las ciudades.
