Cómo solucionar la sequía de forma sostenible
La sequía es uno de los efectos más devastadores del cambio climático. En este vídeo se presenta un proyecto del escritor Alberto Vázquez-Figueroa ratificado por los cuatro catedráticos más importantes de la Universidad Politécnica de Madrid que podría solucionar la producción de agua potable ilimitada para uso de boca y para el regadío, y a coste próximo a cero, pero que está siendo boicoteado por diferentes corruptos implicados en el negocio del agua y de la electricidad. El sistema patentado por Vázquez- Figueroa representaría un ahorro energético para España de 15.000 millones de euros anuales.
Se trata de un problema global, ahora mismo China tiene que «fabricar» lluvia para enfrentarse a la mayor sequía en seis décadas. Se trata de lanzar sustancias condensadoras en las nubes, como el yoduro de plata, mediante obuses o cohetes para provocar la lluvia.
En otras latitudes la sequía deja al descubierto los restos de poblaciones que fueron sumergidas por los pantanos, como en Sau (provincia de Girona, España) que permite ir a pie hasta la antigua iglesia del pueblo que normalmente está bajo las aguas.
Como dice el dicho «en cada tierra hacen su guerra» y si aquí se pueden visitar las antiguas iglesias sumergidas por los pantanos, en el en el Lago Mead, cerca de Las Vegas, lo que descubre la sequía son los cadáveres de antiguos asesinatos de la mafia.
De lo que no hay duda es que el consenso sobre la escasez del agua ha alcanzado a toda la sociedad, y no han sido los últimos en apuntarse los inversores que se han dado cuenta que el activo físico o «commodity» más imprescindible para la vida, junto con el aire, es el agua, que el agua potable es un bien finito y que su demanda aumenta cada día, en efecto el crecimiento de la población mundial que ha pasado de 2.630 millones en 1950 a 6.671 millones en 2008, y se esperan 8.000 millones en 2025, va a disparar su demanda. Su producción es limitada porque aunque el 70% de la superficie terrestre está formada por agua, solo un 3% es agua dulce y de este 3% casi toda está “almacenada” en los polos y el resto en los acuíferos subterráneos, por lo tanto queda únicamente un 0,3% de ese 3% como agua para consumo humano.
Consecuentemente diferentes operadores han empezado a crear productos de inversión referenciados con el agua, como los hay referenciados al oro, a las divisas o al petróleo. Se puede invertir individualmente en las empresas que tienen las concesiones para el tratamiento y distribución del agua potable, pero por cuestiones de diversificación y por la dificultad de los análisis es mejor invertir en índices o cestas de valores compuestos de empresas que tratan el agua.
Los expertos recomiendan S&P Global Water Index que está compuesto por las 50 principales compañías del mundo relacionadas con el tratamiento de agua, creado en 2001 y con una revalorización acumulada del 220% o en World Water Index compuesto por las 20 principales compañías que obtienen la mayor parte de sus ingresos del suministro del agua, infraestructuras del agua o tratamiento y depuración del agua.
También se puede invertir en estos índices, con menos riesgo y a partir de cantidades más asequibles a través de ETFs que repliquen el comportamiento de los índices mencionados.