El fideicomiso es una forma de control de la herencia, ya que el heredero directo, llamado fiduciario, conseguirá el patrimonio en nombre del indirecto, el fideicomisario, cuando el testador fallezca.
Esta figura se emplear de manera habitual con la finalidad de cuidar los bienes a heredar, ya que al utilizarlo el testador certifica que sus bienes serán cuidados y administrados por una persona o ente de confianza antes de ser cedidos a la persona a la que se ha designado.
Es considerado como una herramienta jurídica que se emplea de manera habitual en los negocios con la finalidad de conservar el patrimonio de la familia.
¿Qué es un fideicomiso y quienes intervienen en él?
El fideicomiso es un instrumento de sustitución hereditaria y se escoge como sustitución fideicomisaria, por que actúan tres personas:
- El causante o fideicomitente: se conoce como el testador y es el propietario originario del patrimonio otorgado, a la vez que se encarga de especificar el ejercicio del fideicomiso en su testamento.
- El heredero fiduciario: es la persona que percibe el patrimonio, no para sí mismo sino para un tercero o fideicomisario, tiene como objetivo principal colaborar con la conservación de los bienes y derechos para luego cederlos.
- El heredero fideicomisario: es el heredero final o indirecto, es quien recibirá el patrimonio cuando llegue el momento y será otorgado por el fiduciario.
Es importante mencionar que según nuestras leyes el fideicomiso, solo reconoce como una institución hereditaria.
Características del fideicomiso
El fideicomiso básicamente, es una obligación compuesta, ya que se acepta una herencia y el heredero fiduciario recibe la obligación de entregarla subsiguientemente, tomando en cuenta las circunstancias organizadas por el causante, al heredero fideicomisario.
Por lo que contiene una obligación de mantener el patrimonio y luego se transformará en el compromiso de ceder dicho patrimonio. Por medio de ese fideicomiso se puede escoger a herederos sucesivos, ya que iniciamos con el fiduciario y luego surge el fideicomitente.
Tipos de fideicomiso
El fideicomiso puede ser condicional o a plazo. Si es condicional el testador colocará un requisito que, si se da positivamente, impulsará la obligación del traspaso del fiduciario al fideicomisario.
Pero, si es a plazo la condición será el paso de un tiempo concreto en el testamento. Además que el causante puede especificar si la contrato del fiduciario es sólo por conservación y entrega o va a contener la administración patrimonial.
Es posible aceptar que el fiduciario disponga del patrimonio. También tenemos la forma del Fiduciario profesional, al que se le confía de la administración de bienes por encargo y a favor de su propietario o de las personas o sociedades que este seleccione.
El causante puede especificar las cargas que quiera sobre el fideicomiso y el fiduciario estará forzado a darles cumplimiento, aunque no es su deber restablecerlas.
Ventajas
Entre sus múltiples ventajas podemos mencionar las siguientes:
- Favorece la obtención de un control superior sobre la utilización de los bienes que se encuentran dentro del caudal hereditario
- El causante puede escoger como herederos a personas que originariamente no podrían serlo por la existencia de un sucesor intermedio.
- Puede determinar los fines a los que puede aplicarse el patrimonio legado.
Son de aplicación las particularidades civiles regionales porque esta institución se ha utilizado tradicionalmente para evitar que el patrimonio hereditario escape de la línea familiar. Al designar sucesivos herederos, el causante puede evitar que personas ajenas al clan terminen heredando u obteniendo sus bienes.
En definitiva, el fideicomiso es una herramienta útil para flexibilizar el régimen sucesorio, al tiempo que se garantiza el destino al que servirá el patrimonio legado. Sin embargo, sus particularidades regionales hacen que sea fundamental contar con asesoramiento de un letrado especializado a la hora de recurrir a él.
