Nuevos horizontes para la Gobernanza. Imagen del libro

Nuevos horizontes para la Gobernanza

Nuevos horizontes para la Gobernanza es el título del artículo publicado en el Libro Blanco, Reflexiones y Propuestas para una nueva sociedad Post COVID-19 del por el Coronel Carlos de Palma Arrabal, Coronel Ejército del Aire (R) y piloto.

Gobernanza

El orden por el que se rigen entre sí las relaciones de los grupos que integran la especie humana se denomina arte de la Gobernanza. Esta puede definirse, en
su forma más simple como costumbre o tradición, y de modo más complejo como una estructura que ordena el desarrollo social, económico, político, etc., de poblaciones organizadas en torno a los llamados Estados. Dichos estados se encuentran reconocidos por un Derecho Internacional que pretende la coexistencia de sus respectivos intereses. Aunque con distintos matices, la actual administración de los estados sigue patrones que cubren todo el espectro entre el autoritarismo y las democracias, identificándose por sus respectivas estructuras de gobierno, su constitución, su cultura y las políticas internas y externas que practican.

El mejor patrón de gobernanza a nivel local, regional o mundial, será aquel que proporcione un equilibrio entre el desarrollo integral y sostenible de la población, la paz y el consenso entre vecinos, y la coexistencia sostenible con el medio ambiente o entorno que les sustenta y acoge.

Gobernantes

Sólo disponemos de una vida y de un planeta, pero no tomamos verdadera conciencia de nuestra fragilidad. Con los medios disponibles actualmente, los gobernantes pueden adoptar decisiones muchas veces positivas, consensuadas y en equipo, pero también otras unilaterales de consecuencias dramáticas para poblaciones completas y ecosistemas diversos.

Algunos gobernantes resultan ejemplares, pero en otros casos se rigen por instintos irracionales o intereses egoístas a corto plazo, postergando otros objetivos racionales y de interés común a medio y largo plazo. Actúan a veces con patrones que se debaten entre la solidaridad y la codicia. Una forma tradicional de dirimir intereses han sido los acuerdos, pero también las guerras en sus distintas formas, las cuales perduran hoy día, aunque en campos menos cruentos pero igualmente terribles e inhumanos (confrontaciones comerciales y económicas, flujos de refugiados, crisis sociales y culturales, etc.).

El tradicional espectro de desastres, amenazas y riesgos naturales se ha ampliado con perversos efectos artificiales, provocados a veces por la propia acción humana que alcanza también al fondo de los mares y al espacio. Como consecuencia de las guerras, las sociedades avanzadas han pagado un enorme tributo de sangre, por lo que han evolucionado para basar su gobernanza en el derecho internacional, las relaciones diplomáticas, las alianzas regionales y la implantación de sistemas democráticos originados en el liberalismo. Sin embargo, ningún modelo de gobernanza ni sistema democrático es perfecto, ni ha logrado eliminar la potencial fuente de errores provenientes de las decisiones de sus gobernantes. Es más, sus decisiones constituyen a veces la causa desencadenante de algunas crisis mundiales o regionales, y de agresiones al medio ambiente. En el orden interno de cada estado, las consecuencias de dichos aciertos y errores son similares.

Nuevos horizontes para la Gobernanza

La crisis del Coronavirus ha forzado la aparición de nuevos horizontes y perspectivas, obligando a extraer nuevas dosis de instinto e inteligencia en nuestra población y sus gobernantes. Atendiendo a dichos nuevos horizontes y entornos, se aportarán seguidamente algunas propuestas a tener en cuenta para la Gobernanza futura:

  • Atención inmediata a los Sistemas de Alerta frente a catástrofes, pandemias, crisis económicas, control de armas, terrorismo, ciberataques, manipulación informativa, etc. Tener previstos y probados los Sistemas de Respuesta y Gestión de Crisis, así como Planes de Contingencia para hacerles frente y minimizar sus daños. También es necesaria la unión, coordinación y solidaridad entre poblaciones y estados.
  • Simplificar o racionalizar la ingente producción normativa y legislativa, para facilitar su control, aplicación y rápida respuesta a las nuevas realidades.
  • Desarrollo y atención a las propuestas de la sociedad civil, como termómetro de detección de las necesidades reales y demandas de la población.
  • Implementación de nuevas tecnologías y control de la inteligencia artificial, complementadas con la atención personal al creciente sector de la tercera edad, para no dejarlo apartado del
    sistema y protocolos de gestión digital.
  • Actualización y corrección de la Legislación Electoral, para que responda a la representatividad real de la población.
  • Exigencia moral para altos cargos políticos, buscando su ejemplaridad y compromiso. Profesionalización y cualificaciones para los cargos del servicio público, procurando su promoción a los más altos niveles de la administración y dirección ministerial e institucional. Racionalizar estructuras organizativas internacionales, regionales, nacionales, territoriales y locales, evitar redundancias y establecer Sistemas de Calidad y Auditorías.
  • Libertad, independencia y autonomía económica de la Prensa en todas sus manifestaciones, evitando censuras, subvenciones o clientelismo estatal.
  • Repensar los modelos de consumo, industriales, productivos y su diversificación. Invertir en innovación.
  • Mejora de la competitividad de las empresas y modernización de los sindicatos. Establecer modelos mixtos presenciales, de tele trabajo y robotizados. Facilitar la conciliación familiar y reconocer el papel de la maternidad en nuestra sociedad. Protección de los colectivos más vulnerables.
  • Derecho a conectarse y usar Internet, mejorar las utilidades y proteger a los usuarios frente a delitos cibernéticos, así como su Identidad digital y privacidad.
  • Prestar atención y adecuada inversión a la ciencia, la investigación y la biotecnología. Igualmente, a las manifestaciones culturales de todo tipo.
  • Dar estabilidad no partidista y consensuar los sistemas estatales de Sanidad, Educación, Seguridad y Defensa, así como al poder judicial y las políticas de relaciones diplomáticas
    exteriores y de cooperación.
  • Reducir la huella de carbono en la atmósfera y reciclar todo tipo de residuos.
  • Estimular el debate Global vs Local, así como Urbano vs Rural, junto con la sociedad del conocimiento en red. Facilitar la colaboración Pública, Privada y de la Sociedad Civil.
  • Reflexionar sobre la espiritualidad y el propósito de la vida, y aprender a enfrentar la muerte.

Autor: Redaccion | Artículos

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