Neuritis intercostal

La neuritis intercostal

La neuritis intercostal es la inflamación que se genera como resultado del aplastamiento de uno o más nervios que se encuentran ubicados en el límite inferior de las costillas.

Esta patología suele surgir de manera habitual y es tratable. Aunque causa múltiples síntomas que pueden generar molestias, entre los que se encuentran el dolor intercostal o sensación de quemazón, los cuales llevan al paciente a asistir a consulta.

Es habitual que esta problemática esté relacionada con infecciones virales causadas por el virus del herpes zóster, Puede haber otros factores que originan esta inflamación, entre los que se encuentran los traumatismos o los procedimientos invasivos en esta área.

Síntomas de la neuritis intercostal

El principal síntoma de esta patología es la aparición de un dolor agudo en el área de las costillas. Este dolor se identifica como un dolor urente o lacerante y puede surgir cuando el paciente se encuentre en estado de reposo.

Esta sensación de dolor puede cambiar generalmente con los movimientos respiratorios. Incluso pueden generar dolores en el brazo del lado afectado, pudiendo sentirse otros trastornos como entumecimiento y sensación de opresión.

Además si se inclina el tronco hacia delante puede generar dolor. Existen casos en los que surgen otros síntomas de inflamación como enrojecimiento de la piel. Aunque no suele ser habitual como resultado del tamaño tan reducido de los nervios intercostales.

Causas de la neuritis intercostal

Es común que la aparición de esta problemática se relaciones con la aparición de infecciones virales. Éstas son causadas por el virus herpes y surgen como resultado de otros factores que pueden liberar neuralgia intercostal. Es decir, dolor con un proceso inflamatorio más reservado.

Entre estos factores se pueden nombrar los traumatismos y procedimientos invasivos como por ejemplo las intervenciones quirúrgicas. Por lo tanto es un padecimiento bastante habitual en la población, sin importar su ubicación geográfica.

Si la causa se relación con una infección viral, surgen algunos elementos que inducen a la enfermedad. Por ejemplo el estrés, ya sea psicológico o generado por ejemplo como resultado de intervenciones quirúrgicas.

Además, puede ser provocado por la inmunodepresión como resultado de la ingesta de medicamentosa o causado por una patología de base.

Diagnóstico

Para la identificación de esta enfermedad se realiza un proceso básicamente clínico. Los datos aportados por el paciente se relacionan con los resultados del examen físico. De esta manera tendremos los elementos necesarios para la realización del diagnóstico.

Existen estudios de imagen complementarios que favorecen la detección de otras causas que expongan los síntomas. Pero un cuadro clínico relacionado con neuritis intercostal hace que no sea necesario el empleo de estos métodos, pudiendo ser utilizados cuando surjan casos refractarios a tratamiento o evoluciones atípicas.

Tratamiento para la neuritis intercostal

El tratamiento de la neuritis intercostal se realizará según la causa básica del mismo,. Es recomendable un periodo de reposo, inmovilización y el tratamiento quiropráctico, sobre todo en casos donde la afectación no sea por traumatismo. La quiropráctica genera excelentes resultados en la disminución de problemas de origen mecánico, siendo esencial que se busque la raíz del problema para generar mejores resultados.


Autor: Redaccion | Artículos

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